martes, 15 de mayo de 2018

REFLEXIÓN SOBRE LA TRANSCEDENCIA (IMMANUEL KANT :1724-1804)



En el siglo XVIII,en un humilde pueblo de Alemania, Konigsberg, (hoy Kalingrado, actual Rusia) nació una de las mentes más brillantes y poderosas de la historia del pensamiento humano. Me refiero a Immanuel Kant. Kant era un hombre creyente, pero como buen buscador de sentido existencial tenía sus preguntas, sus dudas, y, supongo que cierta inquietud que suelen tener algunas personas llegando en ocasiones a la angustia e incertidumbre.
Kant había elaborado un esquema con cuatro preguntas que para él eran muy relevantes. Eran las siguientes: ¿qué puedo saber?,¿qué debo hacer?,¿qué puedo esperar? y la última, que engloba las tres anteriores ¿qué es el hombre?.La primera pertenece a la metafísica, la segunda a la moral, la tercera a la religión, y la última(que como dije más arriba engloba todas) pertenece a la antropología. Kant era un buscador incansable del sentido de la existencia y de la vida, y todo su pensamiento lo desarrolló apenas sin salir de su pueblo.

Para mucha gente la búsqueda del sentido en la vida es de una gran importancia. De ello depende la felicidad y plenitud de muchas personas. Uno viene al mundo y en los primeros tiernos años no es muy consciente de las cosas, solo vive y sueña de una manera ingenua que todos quisiéramos recuperar. Es realmente feliz pero no es muy consciente de ello. Pero, cuando se llega a cierta madurez, uno se llena de dudas que le hace confundirse y perturbarse, perdiendo el norte y tambaleándose como si anduviera en una cuerda floja sin red debajo. Immanuel se enfrentó a ese abismo tenebroso, y parece que salió bastante bien parado, y dejó una profunda huella en la historia del pensamiento filosófico y metafísico.

Kant era una mente compleja y una persona creyente, y en consecuencia creía en un Dios y en una vida futura. Tan seguro estaba de su fe, que en 1763 escribió un libro titulado:"La única demostración posible de la existencia de Dios", lo cual nos da una idea de su creencia en lo trascendente. Hay quien piensa, que el simple hecho de creer en Dios es algo retrógrado y poco inteligente, pero el filósofo de Konigsberg dio muestras (como muchos pensadores que le precedieron) de que la fe y la ignorancia no siempre van de la mano.


3 comentarios:

  1. Muchas gracias por tus reflexiones,esperando leer el siguiente.

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    1. GRACIAS POR LEER NUESTRO BLOG.NOSOTROS ESTAMOS ESPERANDO UNO DE SUS SIGUIENTES POST

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